Este es un proyecto realizado en 2015 por encargo de Puerta, espacio cultural situado en Bilbao. Allí ocurren talleres, sesiones de trabajo, encuentros, proyecciones de películas, debates y propuestas.
Como espacio cultural gestionado por artistas, la libertad creativa a la hora de abordar el proyecto era casi total. Mi misión era la de diseñar las cortinas para dos grandes ventanales y otros tres huecos más pequeños. La propuesta final se concretó con un diseño digital, geométrico y con un cierto efecto óptico para las ventanas grandes; y de manera absolutamente contrastada, un dibujo hecho a pastel representando la textura de la madera y reproducido sobre tela, para las ventanas más pequeñas.
En este proyecto participó también el artista Kiko Pérez, quien se ocupó de la decoración exterior.
Como espacio cultural gestionado por artistas, la libertad creativa a la hora de abordar el proyecto era casi total. Mi misión era la de diseñar las cortinas para dos grandes ventanales y otros tres huecos más pequeños. La propuesta final se concretó con un diseño digital, geométrico y con un cierto efecto óptico para las ventanas grandes; y de manera absolutamente contrastada, un dibujo hecho a pastel representando la textura de la madera y reproducido sobre tela, para las ventanas más pequeñas.
En este proyecto participó también el artista Kiko Pérez, quien se ocupó de la decoración exterior.